
antes en baires como ahora en tilcara, a mora le gustaba sentarse arriba del monitor de la PC.
Allá, su mirada se perdía entre los edificios. Ése que se ve en la foto, nunca se habitó. Hasta que nos fuimos, fue sólo obreros y construcción y luego pintura y barandas y persianas, pero nunca llegó a ser hogar de nadie.

1 comentario:
Cuanto más relajada se ve Mora en Tilcara......
Es la magia del lugar??
Cris
Publicar un comentario