Le saqué la foto desde la cama. Ella se sienta ahí a esperar a los otros gatos del barrio. Al negrito, que es amigo, y al gris y blanco, que es enemigo.
2 comentarios:
Anónimo
dijo...
Es muy raro esto de encontrarlos, a vos, a él, a Tilcara, a Mora y a todos los recuerdos juntos. Es muy extraño, para mí, sentir que esos gatos de los que habla más arriba son gatos que yo también viví, o sentí, o palpité, y en parte a través suyo. Y si pienso en gatos y en Tilcara, indefectiblemente pienso en vos, en él y en el verano. En la magia que tienen tu lugar en el mundo, vos y él. Y en que de verdad este verano, estos días que compartimos, todas las conversaciones que tuvimos y los vinos que nos tomamos dejaron mucho en mí. Más de lo que pareciera y más de lo que seguramente te demuestre. Dale nena, seguí escribiendo que me encanta leerte. Muchos, muchos besos.
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Es muy raro esto de encontrarlos, a vos, a él, a Tilcara, a Mora y a todos los recuerdos juntos. Es muy extraño, para mí, sentir que esos gatos de los que habla más arriba son gatos que yo también viví, o sentí, o palpité, y en parte a través suyo. Y si pienso en gatos y en Tilcara, indefectiblemente pienso en vos, en él y en el verano. En la magia que tienen tu lugar en el mundo, vos y él. Y en que de verdad este verano, estos días que compartimos, todas las conversaciones que tuvimos y los vinos que nos tomamos dejaron mucho en mí. Más de lo que pareciera y más de lo que seguramente te demuestre. Dale nena, seguí escribiendo que me encanta leerte. Muchos, muchos besos.
Tilcara era una postal. Ahora es otra cosa, lo sé.
besos de a miles
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